Cuando ya no escriba de la sal
y las tierras marinas vuelen de mis manos,
detengan mi pluma.
Si no se curte la tinta,
no sabrá a orilla,
su voz no durará nada,
habré perdido el trazo de los alcatraces,
el necesario arte de la marera,
la prodigiosa danza del cardumen de sardinas.
Juan Ortiz
Del libro Cuerpos en la orilla (2020)
Excelente.